Su periódico, LA NUEVA ESPAÑA, recogía en su edición del 2 de septiembre una tribuna de opinión titulada ‘Cesáreas’, escrita por Eduardo Jordá, en la que se incluye una desafortunada manifestación sobre cáncer y homeopatía.
La Asamblea Nacional de Homeopatía, en representación de los profesionales sanitarios (médicos, veterinarios y farmacéuticos), desea aclarar que:
-Las sociedades que abogamos por una medicina integrativa que incluya la homeopatía en la práctica clínica diaria somos conscientes de los riesgos que entraña el abandono de terapias como la quimioterapia o la radioterapia en el paciente oncológico, y es por eso que la homeopatía no se ha ofrecido nunca como terapia única o sustitutiva.
-El uso de la homeopatía en el paciente oncológico persigue mejorar la calidad de vida del paciente y tratar, entre otros, los síntomas asociados a los efectos secundarios de la quimioterapia y la radioterapia (problemas digestivos, afecciones dermatológicas, dolor). De esta manera, integrando la homeopatía en el tratamiento como un medicamento complementario, se puede llegar a conseguir una mayor adherencia del paciente, permitiendo que éste sobrelleve mejor los ciclos y pueda concluir la terapia.
-El perfil de seguridad de los medicamentos homeopáticos los hace perfectamente compatibles con los tratamientos empleados en la actualidad en pacientes oncológicos, con lo que no presentan interacciones y facilitan el tratamiento del paciente.
-Es necesario que los profesionales de la salud reciban la formación adecuada para que puedan ofrecer al paciente una correcta visión de su enfermedad y de las terapias que tiene a su alcance, aclarando sus dudas y guiándolo en todo momento hacia el tratamiento o tratamientos que sean más adecuados para su situación.
Todos ello en pos de crear sinergias y de avanzar hacia una medicina más integrativa, que sume y busque siempre la mejor atención al paciente.
Gonzalo Fernández Quiroga, portavoz de la Asamblea Nacional de Homeopatía, Barcelona.