En estos momentos en los que la Homeopatía está apareciendo como protagonista en numerosos medios de comunicación, como profesional médica homeópata y terapeuta, me dirijo a todos los usuarios de mi consulta.

En la mayoría de las ocasiones se trata de ataques directos, carentes de sentido, que quieren dar una imagen desprestigiada de la Homeopatía. En vez de reconocer la aportación que esta medicina está ofreciendo a muchas personas y a muchas familias, utilizan toda la energía en desvalorizar a la Homeopatía como ciencia, a l@s que la practicamos y a l@s usuarios. Se ha ido más lejos, más lejos porque tener la prepotencia de expresar de diferentes formas que la gente es engañada, que son ignorantes y no saben lo que hacen , dice mucho de personas que amparándose en la palabra “ciencia” piensan que el saber está en sus manos. Pero no hay mayor ignorancia que no reconocer que no se puede saber todo. Dicho de otra forma, pensar que estás en posesión de la verdad, que eres omnipotente para mi juicio eso es un delirio.

Es por todo esto que me dirijo a vosotr@s con todo mi respeto para respaldar vuestras elecciones en vuestra vida. Tanto si se ha utilizado la Homeopatía de forma puntual o la utilizáis con mayor frecuencia o incluso como opción médica principal. Muchos confiando en esta medicina para el crecimiento de vuestros hijos creando un espacio de dignidad, escucha y respeto.

Ahora me gustaría comentaros algunos mitos y tabúes que planean sobre la Homeopatía y ofrecer otra visión cimentada en el estudio y los años de experiencia como homeópata:

La Homeopatía no es una cuestión de fe. Como todo lo que nos hace madurar como persona y evolucionar en la vida en general, la Homeopatía es experiencia. Es experiencia porque al tomarla es cuando se producen los cambios, y ante esos cambios es cuando puedes decidir como sujeto si es una buena medicina para ti o para tus seres queridos, y es ahí, en el propio individuo donde demuestra su valor y utilidad.

Cuando las personas se acercan a la Homeopatía es porque buscan soluciones para su salud, y ahí está la Homeopatía para ayudarlas teniéndolas en cuenta y valorándolas porque cada cosa que una persona siente es real para ella, merece nuestro respeto y es útil para encontrar su curación.

A las personas que acuden a mi consulta nunca les planteo que crean en algo que no conocen sino que prueben y decidan. La evolución de su enfermedad es el indicativo de si les va bien. A mi entender no hay mejor evidencia para cualquier medicina, ni mejor forma de demostrar su valía.

En la práctica médica primero hay un diagnóstico clínico que es el mismo que realizan todos los médicos, sean convencionales o homeópatas y luego en la Homeopatía hay el diagnóstico terapéutico que es la elección del remedio que mejor pueda funcionar para la enfermedad que esa persona padece. Y con esto quiero recalcar que primero se es médico y luego como homeópata se trata de individualizar y globalizar para tratar las dolencias de la persona. En el seguimiento del paciente como todos los médicos nos apoyamos en las pruebas complementarias y en la evolución de ellas como pueden ser analíticas, Ecografías, Tac…

La intención de la homeopatía es dignificar a la persona desde una puerta de entrada que son los síntomas, para hacer que toda la fuerza de sus capacidades curativas se ponga en marcha para restablecer el equilibrio.

Hablar de la Homeopatía sólo desde la evidencia científica es darle un significado reduccionista que es justo lo que no es. Teniendo en cuenta que los parámetros científicos son pre-establecidos por un sistema que dice lo que es científico y lo que no es ciencia.

Además en la actualidad numerosas experimentos reafirman la eficacia del medicamento homeopático. Pero la Homeopatía en si va más allá y aporta elementos terapéuticos que no pueden ser comprobados más que de forma individual en cada uno de los que la experimentan.

Porque la Homeopatía es individualizada y globalizadora en su enfoque y resultado.

Tanto en la práctica con adultos como en niñ@s he podido observar y experimentar como la frecuencia en la utilización de fármacos disminuye notablemente. Teniendo en cuenta que el abuso de fármacos es una de las causas principales de muerte de nuestra sociedad podemos ver la gran capacidad preventiva, la ayuda que significa la Homeopatía.

Las personas son protagonistas de su salud desde ser sujeto y no objeto de su salud. La medicina está al servicio de la persona y no la persona al servicio de la medicina.

Otra creencia errónea muy difundida es pensar que la Homeopatía es lenta. Hay enfermedades agudas y otras crónicas. Cuando se trata un cuadro agudo como puede ser una amigdalitis la Homeopatía cura rápidamente y en la enfermedad crónica ayuda a controlar los síntomas de forma adecuada e incluso en ocasiones consigue eliminarla. En procesos urgentes de gran sufrimiento como por ejemplo un dolor por cólico nefrítico, el efecto de la medicación homeopática puede ser instantáneo.

Como habéis visto he repetido muchísimas veces la palabra Homeopatía, la he puesto en mayúsculas y en ningún caso la he abreviado. No ha sido casual. La Homeopatía se merece todo nuestro respeto y nuestro apoyo.

La medicina del futuro y de los que ya tienen una visión amplia de la vida y el mundo, es la medicina que integra, la medicina que suma y no que resta, la medicina que suma todo lo útil para la salud y el bien estar del individuo y de la sociedad global, la medicina que más allá de cualquier interés que no sea obtener y mantener la salud, trabaja con todos los medios adecuados a su disposición en su medio. Y aquí en nuestro medio, en nuestra época, afortunadamente tenemos la Homeopatía, una suma de mucho valor.

Me despido con todo mi agradecimiento hacia tod@s los que hacen posible que esta Ciencia que es la Homeopatía siga adelante y día a día ayude a tantas personas a encontrarse mejor y ser un poco más felices.

Doy las gracias a todos mis compañer@s tanto homeópatas como los que trabajan en la salud pública que ayudan al conocimiento y transmisión de esta maravilla de curación y sobre todo a vosotr@s a quien va dirigida, los verdaderos trasmisores de la Homeopatía.

Fdo.

Mari Carmen López Cirauqui.

Licenciada en Medicina y Cirugía.

Médica Homeópata.

Terapeuta en Biodescodificación.